La pregunta Are there other words in Spanish that can't be written? (like sal-le) contiene a su vez un enlace en el que comentan que la RAE ya reconoció que sal·le es una palabra del español que se puede pronunciar (haciendo una pausa entre las dos l) pero que no se puede escribir, porque al escribirla cambia su pronunciación. Y el español no tiene en su ortografía contemplado el signo · como sí lo tiene el catalán, por ejemplo.
El artículo finaliza diciendo que posiblemente este sea el único bug conocido del idioma español. Dado que suele ser una pregunta recurrente, la propia RAE ha explicado que
Son incorrectas *«salle» y *«sal.le» para escribir el imperativo «sal» + clítico «le».
y ha liberado un documento (PDF) que dice:
[...] este sería el único caso en el que aparecerían dentro de una palabra española dos eles contiguas, cada una de ellas perteneciente a una sílaba diferente, secuencia fónica cuya representación se halla bloqueada en nuestro sistema gráfico, puesto que concurriría con el dígrafo ll [...].
Y concluye:
[...] lo natural es que, en su lugar, se generen expresiones en las que el pronombre de dativo se sustituye por el sintagma correspondiente (o, incluso, por un posesivo: sal a su encuentro) o en las que el verbo salir aparece en infinitivo como núcleo de una perífrasis modal de obligación (tener que + infinitivo; deber + infinitivo; haber de + infinitivo; la impersonal haber que + infinitivo) [...]
Y cita:
«Mas tú, guardando el sin igual decoro que guardas en empresas exquisitas, sal al encuentro luego a esta canalla, puesto que perderás en la batalla» (Cervantes Comedia famosa de la casa de los celos y selvas de Ardenia [España 1615]);
«Mira, aquella es la Sunamitis. Sal a su encuentro, y dile: ¿Te va bien a ti y a tu marido y a tu hijo?» (Molina Misal completo [España 1943]);
«Hay que salir al encuentro de los chismes, dijo la maestra» (Allende Eva Luna [Chile 1987]).
Curiosamente, este bug no se da en los países con voseo, en los que el imperativo de segunda persona de singular de salir es salí (vos), por lo que en dichos países el imperativo más el clítico sería salile, perfectamente válido.